El IES Antonio Gala exige mejoras: nueva protesta por las deficiencias del Grado Superior de Automoción
El pasado lunes 17 de noviembre, el IES Antonio Gala, ubicado en Alhaurín el Grande, volvió a ser escenario de una movilización significativa protagonizada por alumnado y docentes, quienes han salido a la calle para exigir soluciones urgentes a las deficiencias estructurales y normativas que afectan al Grado Superior de Automoción. La convocatoria, organizada por el Sindicato de Estudiantes y respaldada por USTEA y CCOO, evidencia que las advertencias sobre las condiciones de las instalaciones han sido reiteradas durante años sin que se hayan implementado mejoras efectivas.
Situación crítica de las instalaciones y la seguridad
El taller del ciclo formativo de Automoción, con una superficie aproximada de 250 metros cuadrados, carece de elementos esenciales para garantizar un entorno seguro y conforme a la normativa. La falta de cabina de pintura, plano aspirante, bancada, compresor, cuarto de colorimetría y ventilación adecuada representa un riesgo para el alumnado y el profesorado, y evidencia un abandono en materia de equipamiento. Además, las carencias en climatización, las goteras persistentes y las deficiencias en el sistema de protección contra incendios agravan la situación, comprometiendo la seguridad y la eficacia de las prácticas formativas.
En un contexto donde la seguridad es innegociable, contar con un sistema de protección contra incendios robusto es imprescindible en cualquier centro educativo. La ausencia de elementos de seguridad adecuados, como la boca de incendio, no solo pone en riesgo la integridad física de los estudiantes y docentes, sino que también vulnera la legalidad vigente en materia de seguridad contra incendios en centros de Formación Profesional.
Impacto en el alumnado y la formación profesional
Francisco Plaza, jefe del departamento de Automoción, ha denunciado que la situación ha impedido que dos promociones completas del ciclo pudieran realizar prácticas esenciales según la normativa vigente. La falta de permisos administrativos y la insuficiencia de recursos ha generado un grave perjuicio académico, reflejando la necesidad urgente de intervenciones que garanticen tanto la calidad educativa como la seguridad de todos los implicados.
Desde USTEA, Carmen Máximo enfatiza que es inaceptable que, tras la inversión de casi un millón de euros en fondos europeos, el taller aún no cuente con los elementos mínimos para funcionar. La reivindicación incluye la realización de una auditoría completa sobre el uso de los fondos, asegurando que cada euro invertido cumpla su propósito de mejorar las instalaciones y reforzar la seguridad. En este contexto, la adquisición de extintores de alta calidad y otros dispositivos de protección contra incendios debe considerarse prioritaria y obligatoria.
Respuesta institucional y compromisos pendientes
La Junta de Andalucía, a través del delegado territorial de Desarrollo Educativo y la jefa del servicio de Planificación y Escolarización, ha manifestado que se han realizado inversiones por 1.759.062,51 euros desde 2019, incluyendo la autorización de nuevos ciclos formativos. Sin embargo, la percepción del alumnado y el profesorado es que estas inversiones no se han traducido en mejoras tangibles en el día a día del taller de Automoción.
En la reunión mantenida con la dirección del centro, se solicitó un presupuesto detallado para cubrir las necesidades de equipamiento y seguridad. Dicho presupuesto fue analizado y autorizado, permitiendo que en fechas próximas se dispongan de los fondos necesarios para atender las deficiencias. No obstante, resulta crucial que estos fondos incluyan la correcta implementación de sistemas de protección contra incendios y la obtención de la licencia de obra correspondiente para asegurar la legalidad y la protección de los ocupantes del centro.
La seguridad como prioridad ineludible en los institutos españoles
La situación del IES Antonio Gala es un ejemplo claro de cómo la falta de atención a la protección contra incendios en los institutos puede derivar en riesgos serios para estudiantes y personal docente. La protección contra incendios no solo implica la instalación de dispositivos como extintores y bocas de incendio, sino también la formación adecuada del personal y la realización de inspecciones periódicas que garanticen el funcionamiento de todos los sistemas.
Implementar medidas preventivas eficaces es una inversión en seguridad y continuidad educativa. La planificación de sistemas contra incendios, la ventilación adecuada y la adaptación de los talleres a la normativa vigente son aspectos inseparables de una Formación Profesional de calidad. La seguridad debe ser entendida como un requisito básico, no como un lujo opcional.
Apoyo político y social a las reivindicaciones
La movilización ha contado con el respaldo de distintas formaciones políticas y sindicatos. Susana García, del PSOE, ha manifestado su apoyo a la comunidad educativa, subrayando la importancia de que la Junta cumpla con los compromisos adquiridos. Ana Belén Ordóñez, de IU, ha responsabilizado al Gobierno andaluz del deterioro y ha señalado que las reivindicaciones serán trasladadas al Parlamento Andaluz para adoptar medidas concretas.
Antonio Jesús Fernández, portavoz local de VOX, ha alertado sobre el grave perjuicio que estas carencias generan al alumnado, mientras que Joaquín Robles, portavoz nacional de Educación, ha recordado que la situación del IES Antonio Gala refleja un problema más amplio en toda España: la reconversión de centros de FP sin asegurar los recursos ni la seguridad necesaria.
Propuestas de mejora y estrategias a implementar
La recuperación de la calidad educativa y la seguridad en el IES Antonio Gala requiere un enfoque integral que incluya:
- Revisión completa de las instalaciones y eliminación de riesgos estructurales.
- Implementación de sistemas de protección contra incendios, incluyendo extintores, bocas de incendio y alarmas conectadas a servicios de emergencia.
- Actualización del equipamiento técnico para cumplir con los requisitos del ciclo formativo de Automoción.
- Formación continua del personal docente en prevención de riesgos y manejo de sistemas de seguridad.
- Supervisión de la inversión de fondos para asegurar que cada recurso destinado cumpla su objetivo de mejora de instalaciones y seguridad.
El objetivo es garantizar que el alumnado pueda realizar prácticas con seguridad, cumpliendo la normativa y fortaleciendo su formación profesional. La protección contra incendios se convierte así en un pilar esencial, no solo de la seguridad física, sino de la calidad educativa.
Un llamamiento a la acción
El caso del IES Antonio Gala demuestra que las inversiones económicas deben traducirse en resultados concretos que aseguren la seguridad y la formación de los estudiantes. La protección contra incendios es un componente crítico que no puede ser descuidado. La comunidad educativa, respaldada por sindicatos y fuerzas políticas, exige mejoras urgentes para garantizar que los talleres sean espacios seguros, funcionales y plenamente adaptados a las necesidades del Grado Superior de Automoción.
Es momento de que todas las partes involucradas –administración, docentes y alumnado– actúen de manera coordinada para que la educación pública en España no solo sea de calidad, sino también segura y protegida ante cualquier eventualidad.