Protección contra incendios en instalaciones metalúrgicas (Ley GICA)

Protección contra incendios en instalaciones metalúrgicas (Ley GICA)

En el universo industrial, las instalaciones metalúrgicas representan uno de los entornos más exigentes en materia de seguridad y protección contra incendios. La Ley GICA (Gestión Integrada de la Calidad Ambiental) establece un marco normativo preciso para la operación de estas plantas, priorizando la seguridad del personal, la preservación de las instalaciones y el cumplimiento de la legalidad vigente. Cumplir con estos requerimientos no solo evita sanciones económicas severas, sino que es un requisito imprescindible para la tramitación de licencias de actividad, licencias de apertura y declaraciones responsables.

Clasificación de instalaciones metalúrgicas según Ley GICA

La Ley GICA categoriza las instalaciones metalúrgicas en función del tipo de actividad y del riesgo asociado. Las categorías 3.1 a 3.13 (excepto la 3.8) requieren atención máxima en prevención de incendios. Estas se dividen en:

  • AAI (Autorización Ambiental Integrada): instalaciones de gran capacidad y alto riesgo.
  • AAU (Autorización Ambiental Unitaria): menor capacidad, pero con requisitos específicos de seguridad.
CategoríaActividadClasificación
3.1Producción de metales no ferrosos en brutoAAI
3.2Producción de fundición o acero bruto (> 2,5 t/h)AAI
3.3Transformación de metales ferrosos (laminado, forjado, recubrimiento)AAI
3.4Fundiciones de metales ferrosos (> 20 t/día)AAI
3.5Fusión de metales no ferrosos (> 4 t/día plomo/cadmio; > 20 t/día otros)AAI
3.6Tratamiento superficial por electrolisis o químico (> 30 m³)AAI
3.7Actividades de 3.2–3.6 con menor capacidad pero cercanas a zonas residenciales (> 1 ha)AAU
3.9AstillerosAAU
3.10Construcción o reparación de aeronavesAAU
3.11Fabricación de material ferroviarioAAU
3.12Fabricación o montaje de vehículos y motoresAAU
3.13Plantas integradas para la fundición inicial de hierro y aceroAAU

Normativa esencial en protección contra incendios

El cumplimiento normativo es determinante para operar legalmente. Entre las principales regulaciones se encuentran:

  • RIPCI (Real Decreto 513/2017): establece el diseño, instalación y mantenimiento de los sistemas de protección contra incendios.
  • RSCIEI (Reglamento de Seguridad contra Incendios en Establecimientos Industriales): define medidas específicas según el riesgo y la superficie de la instalación.

En este contexto, la instalación de extintores homologados se convierte en un elemento crítico. No solo son esenciales para la seguridad, sino que su correcta ubicación y tipología son decisivas en la aprobación de licencias de actividad y apertura.

Medidas de protección contra incendios en instalaciones metalúrgicas

Protección activa según RIPCI

  • Sistemas automáticos y manuales de detección y alarma.
  • Extintores portátiles y móviles distribuidos estratégicamente, esenciales en todas las áreas de riesgo.
  • Sistemas fijos de extinción, incluyendo rociadores automáticos, espuma física, polvo y agentes gaseosos.
  • Red de hidrantes y abastecimiento continuo de agua contra incendios.

La elección adecuada de un extintor ABC garantiza la versatilidad para intervenir sobre distintos tipos de fuego, desde metales combustibles hasta líquidos inflamables.

Exigencias adicionales según RSCIEI

  • Alarma manual obligatoria a partir de 1.000 m² (producción) o 800 m² (almacenamiento).
  • Señalización acústica y megafonía en instalaciones mayores de 10.000 m².
  • Sistemas especializados de extinción: espuma para líquidos inflamables, polvo para metales y agentes gaseosos para equipos sensibles.

Relación entre clasificación GICA y medidas contra incendios

Las instalaciones con AAI (categorías 3.1–3.6) requieren proyectos técnicos completos, sistemas de detección, alarma y extinción integrales, y un mantenimiento periódico obligatorio. Por su parte, las AAU (3.7, 3.9–3.13) presentan un riesgo menor, pero exigen cumplir con normativas mínimas en extinción, señalización y detección.

Claves para garantizar cumplimiento y obtener licencias

Para tramitar licencias de actividad, apertura o declaraciones responsables, las empresas metalúrgicas deben:

  • Realizar un estudio de riesgos específico según la actividad.
  • Elaborar un proyecto técnico con todas las medidas de protección contra incendios.
  • Instalar equipos homologados por empresas autorizadas.
  • Programar mantenimiento periódico conforme a RIPCI.
  • Formar al personal en el uso de extintores y planes de evacuación.

La protección contra incendios en instalaciones metalúrgicas no es un mero requisito legal: es un compromiso con la seguridad, la eficiencia y la legalidad. Cumplir con la Ley GICA, RIPCI y RSCIEI permite operar con tranquilidad, prevenir riesgos graves y garantizar la obtención de licencias esenciales para el funcionamiento industrial. Invertir en sistemas de protección contra incendios, extintores adecuados y mantenimiento técnico certificado es, sin duda, la mejor decisión estratégica y legal para cualquier planta metalúrgica.